Activistas de Palestine Action superan los 50 días en huelga de hambre en prisiones británicas
Médicos advierten de riesgo inminente de muerte mientras el gobierno ignora las demandas. Es la mayor acción coordinada de este tipo desde las históricas huelgas de los presos republicanos irlandeses en 1981.
Varios presos afiliados al grupo Palestine Action han superado los 50 días en huelga de hambre en diferentes cárceles del Reino Unido, en lo que se considera la mayor acción coordinada de este tipo desde las históricas huelgas de los presos republicanos irlandeses en 1981. Médicos y profesionales de la salud han lanzado alertas urgentes sobre el riesgo vital que enfrentan los huelguistas, algunos de los cuales han sido hospitalizados en múltiples ocasiones debido al grave deterioro de su salud, informa The Guardian.
La huelga de hambre comenzó el 2 de noviembre, coincidiendo con el aniversario de la Declaración Balfour, en la que el gobierno británico prometió el establecimiento de un "hogar nacional judío" en Palestina. Inicialmente participaron ocho activistas en prisión preventiva, acusados de delitos como allanamiento, daños criminales y desorden violento relacionados con acciones directas contra instalaciones de la empresa israelí Elbit Systems, principal fabricante de armas de Israel, y una base de la Royal Air Force.
Actualmente, al menos cinco presos continúan la protesta. Amu Gib (también conocida como Amy Gardiner-Gibson), de 30 años, ha alcanzado los 51 días sin ingerir alimentos y ha sido hospitalizada recientemente, necesitando incluso una silla de ruedas para desplazarse debido a la extrema debilidad. Kamran Ahmed, de 28 años, lleva más de 43 días en ayuno y ha requerido varias internaciones. Otros huelguistas incluyen a Heba Muraisi (alrededor de 50 días), Teuta Hoxha (44 días) y Lewie Chiaramello, quien realiza una huelga parcial por problemas de salud como diabetes.
Más de 800 profesionales médicos, entre médicos, enfermeras y terapeutas, han firmado una carta dirigida al secretario de Justicia, David Lammy, advirtiendo que los huelguistas enfrentan "un riesgo muy alto de complicaciones graves, incluyendo fallo orgánico, daño neurológico irreversible, arritmias cardíacas y muerte". El doctor James Smith, médico de emergencias con experiencia en la Universidad College London, ha declarado públicamente que "los huelguistas están muriendo".
Demandas ignoradas por el gobierno
Los activistas exigen cinco puntos clave: libertad bajo fianza inmediata, derecho a un juicio justo (incluyendo la publicación de documentos sobre la "caza de brujas" contra activistas), fin a la censura en sus comunicaciones (correo, llamadas y visitas restringidas), desproscripción de Palestine Action, calificada como "organización terrorista" en julio de 2025, y el cierre de todas las fábricas de Elbit Systems en el Reino Unido, acusando al gobierno británico de complicidad en el genocidio en Gaza.
A pesar de las peticiones de familias, abogados, más de 50 parlamentarios y figuras como Jeremy Corbyn y Zarah Sultana, David Lammy se ha negado a reunirse con representantes de los huelguistas. El gobierno insiste en que se siguen "procedimientos robustos" y que no crearán "incentivos perversos" al negociar.
Apoyo creciente y comparaciones históricas
La protesta ha recibido solidaridad internacional, incluyendo a ex-presos republicanos irlandeses que participaron en las huelgas de 1981, donde murieron 10 personas, entre ellas Bobby Sands. Manifestaciones fuera de prisiones y edificios gubernamentales han aumentado, con detenciones recientes, incluyendo la de la activista Greta Thunberg en una acción de apoyo este mismo 23 de diciembre.
Familiares como Shahmina Alam, hermana de Kamran Ahmed, han expresado su desesperación: "Hay tiempo aún para actuar mejor, terminando con la complicidad británica en el genocidio y apoyando a quienes arriesgan su vida por transparencia". Organizaciones como Prisoners for Palestine denuncian negligencia deliberada, afirmando que "cualquier daño es resultado de la negligencia gubernamental".