Austria anunció este lunes que retirará su veto a la plena adhesión de Rumanía y Bulgaria al espacio Schengen, eliminando el último obstáculo que impedía la incorporación de estos dos países de Europa del Este tras años de espera. “No utilizaremos nuestro veto”, declaró un portavoz del Ministerio del Interior a la agencia AFP, pocos días antes de la reunión decisiva en Bruselas que ratificará la entrada para principios de 2025.
El espacio Schengen, creado en 1985, permite la libre circulación de más de 400 millones de personas sin controles fronterizos entre sus Estados miembros. Hasta ahora, Austria era el único país de la Unión Europea que mantenía su rechazo a la incorporación plena de Rumanía y Bulgaria, justificándolo por el temor a un aumento significativo de solicitantes de asilo a través de sus fronteras.
Con la incorporación de Rumanía, con una población de 19 millones de habitantes, y Bulgaria, con 6,5 millones, el espacio Schengen se ampliará a 29 miembros: 25 de los 27 países de la Unión Europea, además de los cuatro vecinos no comunitarios Suiza, Noruega, Islandia y Liechtenstein.
