Siria posterga elecciones hasta cuatro años mientras su nuevo líder consolida el poder

Abu Mohamed Al-Jolani alarga el proceso constitucional mientras busca afianzar el control de Hayat Tahrir al-Sham.

Abu Mohamed Al-Jolani, líder de Hayat Tahrir Al-Sham y presidente de facto de Siria.
Foto: @LegitTargets (X)

El nuevo líder de facto en Siria, Abu Mohamed Al-Jolani, ha declarado que las elecciones podrían no celebrarse hasta dentro de cuatro años, y sin ofrecer ninguna garantía. Jolani justificó este retraso, que sienta las bases para consolidar el dominio de Hayat Tahrir al-Sham (HTS) sobre el país, alegando que “la redacción de una nueva constitución podría llevar hasta tres años”, una afirmación que ha despertado escepticismo entre analistas, quienes ven en esta maniobra una forma de prolongar indefinidamente el gobierno de facto instaurado tras el derrocamiento de Bashar Al-Assad el pasado 8 de diciembre.

Aunque Jolani insiste en que HTS, heredera directa de Al Qaeda en Siria, se disolvería en una futura “conferencia de diálogo nacional”, muchos temen que esta sea una táctica para blanquear su imagen y desactivar las críticas internacionales. Pese a su promesa de proteger a las minorías, la sombra de su pasado vinculado al Frente Nusra y Al Qaeda, así como sus alianzas con el ISIS, sigue generando desconfianza dentro y fuera del país. Las minorías sirias, particularmente los alauitas y cristianos, denuncian que bajo el nuevo gobierno resurjen políticas de discriminación y represión sectaria.

Mientras tanto, la dependencia de Rusia sigue siendo un factor determinante en la estabilidad del régimen. Jolaini ha reiterado que las bases militares rusas seguirán operativas, dejando claro que Moscú continuará ejerciendo se influencia directa en Siria. En cuanto a EEUU, recientemente han admitido que su presencia militar en el país es mayor de lo que declaraban anteriormente.