El presidente de la Federación Rusa, Vladímir Putin, ha recibió este viernes en Moscú a su homólogo iraní, Masoud Pezeshkian, en un encuentro destinado a fortalecer la relación bilateral. Durante las conversaciones, ambos líderes han abordado temas clave como la situación en Oriente Medio, incluyendo la guerra en Siria y el genocidio en Palestina, el programa nuclear iraní, y las dinámicas en la zona del Transcáucaso. Según declaraciones oficiales de la Oficina del Presidente del Kremlin, las relaciones entre ambos países se basan en “principios de respeto mutuo y consideración de intereses”.
El punto culminante de la reunión ha sido la firma de un nuevo tratado interestatal de asociación estratégica global. Este acuerdo, descrito por las autoridades rusas como “un marco legal para el desarrollo a largo plazo de los lazos bilaterales”, marca un hito en las relaciones entre Moscú y Teherán. “El documento refleja la llegada de los lazos ruso-iraníes a un nuevo nivel”, señala un portavoz del Kremlin.
Pezeshkian, quien visitó Rusia por última vez en octubre para la Cumbre de los BRICS en Kazán, reafirmó la naturaleza estratégica de las relaciones entre ambos países. Durante esa ocasión, enfatizó “la capacidad conjunta de Rusia e Irán para superar las sanciones impuestas por Estados Unidos”, destacando el interés mutuo por fortalecer su cooperación económica, política y militar.