Las Brigadas Al-Qassam de Hamas y milicianos de Yihad Islámica han liberado ocho prisioneros retenidos en la Franja de Gaza este jueves: tres israelíes y cinco tailandeses. El Ejército israelí ha confirmado la liberación y la Cruz Roja Internacional también ha confirmado que estos individuos han cruzado hacia territorio palestino ocupado desde 1948.
Sin embargo, el Estado de Israel ha ordenado detener la liberación a 110 prisioneros palestinos, incluyendo 30 menores. El intercambio se debería haber llevado cabo este mismo jueves, en el marco del acuerdo entre Israel y la Resistencia Palestina, que ha incluido la liberación de varios cautivos en las últimas semanas.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha expresado su descontento con “las condiciones de la entrega de los cautivos en Khan Younis”, calificando las escenas de “impactantes” y exigiendo que los mediadores aseguren que “tales escenas horribles no se repitan”. Se refiere a que esta vez las multitudes palestinas han abarrotado la entrega de prisioneros, dificultando la movilidad de los prisioneros y de los milicianos que los custodiaban. Las entregas anteriores se han efectuado con menos dificultades logísticas y mayor tranquilidad.
La prisionera que más polémica ha levantado en esta liberación ha sido una mujer, supuestamente civil, que el Estado de Israel consideraba “prioritaria”, y que, según los sionistas, “debía haber sido liberada antes por Hamas”. Recientemente, Yihad Islámica Palestina publicó un vídeo donde la prisionera de guerra revelaba que era soldado de las Fuerzas de Defensa de Israel y que su número de identificación militar es 8086762.
