El primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, calificó este miércoles la propuesta de la Comisión Europea de eliminar completamente las importaciones de gas ruso antes de finales de 2027 como “absolutamente inaceptable” y un “suicidio económico”.
En una declaración institucional, Fico afirmó que la hoja de ruta presentada por Bruselas es “una decisión ideológica, que no tiene nada que ver con el sentido común” y advirtió que “cortar por completo las importaciones de gas, petróleo o combustible nuclear de Rusia es una línea roja” para su Gobierno. Según el político, esta medida dañaría “de manera sustancial la competitividad de la UE y de Eslovaquia”, recoge EFE.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, defendió en el Parlamento Europeo “la necesidad de consolidar la posición de Ucrania” y “dejar de importar energía rusa para debilitar la capacidad bélica de Moscú”.
Von der Leyen afirmó que “reabrir los grifos del gas y el petróleo ruso sería un error de proporciones históricas” y recordó que Rusia “ha demostrado repetidamente que no es un proveedor en el que se pueda confiar”, citando reducciones previas en el suministro en 2006, 2009, 2014, 2021 y durante la guerra actual.
La presidenta destacó que las importaciones de gas ruso en la UE han caído del 45% al 13% en poco más de tres años y pidió “un último esfuerzo para eliminar gradualmente las importaciones de combustibles fósiles rusos”.
Además, Von der Leyen instó a los Estados miembros a “apoyar a Ucrania realizando pedidos directos” a su industria militar y subrayó “la importancia de acelerar el proceso de adhesión de Ucrania a la Unión Europea”, que consideró “la mejor manera de garantizar una paz justa y duradera”.
La presidenta advirtió que “un mal acuerdo podría alentar a Putin a regresar” y “generar más inestabilidad e inseguridad”, por lo que defendió que “una paz justa y duradera podría marcar el comienzo de una nueva era de prosperidad para Ucrania y ayudarnos a construir una nueva arquitectura de seguridad para Europa”.