El Gobierno chino ha reclamado este viernes a Filipinas que detenga “de inmediato toda infracción y provocación” en el mar de China Meridional, advirtiendo que, de no hacerlo, responderá con medidas “resueltas”.
Así lo declaró la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Mao Ning, en una rueda de prensa recogida por Reuters, tras un nuevo incidente marítimo ocurrido esta semana entre buques de ambas naciones en aguas en disputa.
Según informó la Guardia Costera china el jueves, se produjeron “medidas de control” sobre embarcaciones filipinas durante una operación de abastecimiento y confirmaron que se registró una colisión.
El suceso ocurre en un contexto de tensión creciente en la región y de cooperación militar entre Filipinas y Estados Unidos.
Por primera vez, buques de guardacostas de ambos países participaron conjuntamente en maniobras con fuerzas navales y aéreas en la zona, según la agencia Reuters.
Desde Manila, la embajadora estadounidense MaryKay Carlson calificó las acciones de China como “agresivas”, afirmando en la red X que estas “pusieron vidas en peligro de forma imprudente y amenazan la estabilidad regional”.
En respuesta, Mao pidió a Washington “no utilizar a Filipinas para generar problemas en el mar de China Meridional ni socavar la paz y la estabilidad en la región”.
China reclama casi la totalidad del mar de China Meridional, pese a las reivindicaciones de otros países ribereños y a una sentencia del Tribunal de La Haya de 2016, que determinó que dichas pretensiones “no tienen base legal”.
