El Pleno del Ayuntamiento de Madrid ha rechazado, con los votos en contra de PP y Vox, la creación de una comisión de investigación sobre el atropello de una niña de diez años por el coche oficial en el que viajaba el director de la Policía Municipal, Pablo Enrique Rodríguez, durante el gran apagón del 28 de abril.
La propuesta, impulsada por el PSOE y apoyada por Más Madrid, buscaba esclarecer los hechos y depurar responsabilidades tras una gestión marcada por la opacidad y la falta de transparencia, según denuncian la familia de la menor y los partidos de la oposición.
El accidente, que dejó a la niña con varias fracturas y lesiones graves, no fue comunicado ni a la vicealcaldesa, Inma Sanz, ni al propio Ayuntamiento por parte de Rodríguez, que se encuentra “de baja médica” desde días después del suceso.
El atestado policial sostiene que “la menor cayó y chocó contra el vehículo”, pero la familia y testigos aseguran que fue embestida por el coche, que circulaba a velocidad inadecuada, y denuncian que no se practicó el control de alcoholemia al conductor ni se retuvo el vehículo para una inspección, incumpliendo los protocolos básicos de actuación.
Durante el debate en el Pleno, el PSOE y Más Madrid reclamaron la dimisión de Inma Sanz y el cese inmediato de Rodríguez por lo que consideran una gestión “cruel, opaca y profundamente irregular”.
Sanz, por su parte, ha defendido la actuación municipal y acusa a la oposición de “sobreactuar” y de “carroñerismo político”, mientras el alcalde José Luis Martínez-Almeida reitera su respaldo al director policial y califica el atropello de “incidente de tráfico”, según recoge Europa Press.
La familia de la menor ha anunciado que denunciará penalmente al Ayuntamiento por atropello, mientras la oposición insiste en la necesidad de una investigación independiente que el Gobierno municipal sigue bloqueando.