Los Estados Unidos de América y la República Popular China celebrarán el lunes 9 de junio en Londres una nueva ronda de negociaciones comerciales, según confirmaron fuentes oficiales de ambos países.
El anuncio se produce tras una conversación telefónica de 90 minutos entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y su homólogo chino, Xi Jinping, en la que ambos mandatarios acordaron “calmar las crecientes tensiones” y buscar una solución a la disputa sobre aranceles y minerales estratégicos.
Trump comunicó que la delegación estadounidense estará encabezada por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, el secretario de Comercio, Howard Lutnick, y el representante comercial, Jamieson Greer.
La cita en Londres representa la segunda fase de las discusiones desde que, en abril, Estados Unidos elevara los aranceles sobre productos chinos hasta el 145% y China respondiera con contramedidas del 125%.
Tras conversaciones previas en Ginebra, ambas partes acordaron una reducción temporal de los gravámenes —al 30% por parte de EEUU y al 10% por parte de China—, pero las acusaciones cruzadas de incumplimiento han reactivado la tensión en las últimas semanas.
Washington acusa a Pekín de bloquear exportaciones de minerales críticos y tierras raras, mientras China denuncia controles estadounidenses sobre semiconductores y restricciones a estudiantes chinos.
En sus declaraciones, Trump afirmó que “la reunión debería ir muy bien” y Xi Jinping insistió en que China ha cumplido “con seriedad” lo pactado, reclamando a Estados Unidos la retirada de los gravámenes.
Según recogen las agencias de noticias internacionales, ambos líderes evitaron abordar otros asuntos bilaterales, como la cuestión de Taiwán, y centraron el diálogo en el comercio y la tecnología.