El gobierno francés ha anunciado un acuerdo para que Renault, en colaboración con una pyme francesa del sector armamentístico, fabrique drones militares en territorio ucraniano.
La iniciativa, impulsada por el ministro de Defensa Sébastien Lecornu, busca a”provechar la experiencia técnica ucraniana y la capacidad industrial” del país galo, instalando líneas de ensamblaje en Ucrania cuya ubicación no ha sido revelada por motivos de seguridad.
Según Lecornu, se trata de un “modelo de colaboración mutua” en el que todo el proceso de producción estará gestionado por ingenieros y técnicos ucranianos, sin traslado de personal francés.
Renault, por su parte, ha confirmado que ha sido contactada por el Ministerio de Defensa francés y que mantiene conversaciones para participar en el proyecto, pero aclara que “no se ha tomado ninguna decisión” y que la empresa “está a la espera de recibir más detalles antes de comprometerse formalmente”.
El acuerdo responde al plan de reforzar la industria militar ucraniana y acelerar la entrega de sistemas no tripulados, en línea con el reconocimiento del propio ministro Lecornu de que “el uso táctico que los ucranianos han desarrollado con los drones es superior al nuestro”.
La noticia se enmarca en una tendencia general europea de relocalización de la producción militar en Ucrania, con otros países como Finlandia, Países Bajos y Reino Unido anunciando iniciativas similares.
Sin embargo, la participación de Renault en la producción de drones militares en Ucrania, aunque avanzada por fuentes oficiales y ampliamente recogida por la prensa, aún no es definitiva y depende de la evolución de las negociaciones entre la empresa y el Elíseo.