Al menos 120 palestinos han sido asesinados y 474 han resultado heridos en las últimas 24 horas por ataques israelíes en toda la Franja de Gaza, según reportes del Ministerio de Salud del enclave.
La cifra total de víctimas mortales confirmadas desde el inicio de la ofensiva israelí en octubre de 2023 asciende ya a 55.104 asesinados y 127.394 heridos graves, con tres cuerpos más recuperados de entre los escombros en las últimas horas del miércoles por la tarde, según Al Jazeera.
Solo esta mañana, 57 personas que buscaban ayuda humanitaria han sido exterminadas y más de 363 han resultados heridas en centros de distribución de alimentos por culpa de los ataques de las fuerzas de ocupación, elevando a 224 el número de muertos y a 1.858 los heridos solo en estos puntos.
Organizaciones internacionales y testigos denuncian que los ataques a civiles hambrientos que acuden a los centros de ayuda se han vuelto frecuentes y especialmente letales, mientras UNICEF alerta de que miles de niños sufren desnutrición aguda y toda la población enfrenta el riesgo de hambruna.
El sistema de reparto de ayuda, gestionado por la Gaza Humanitarian Foundation bajo tutela de la entidad ocupante, es calificado por expertos como “inadecuado por diseño”, con raciones muy por debajo de los mínimos internacionales y una logística que perpetúa la crisis alimentaria.
El sistema sanitario de Gaza está al borde del colapso total, con hospitales saturados, falta de suministros médicos y cientos de pacientes sin acceso a tratamiento adecuado.
El Ministerio de Salud ha lanzado un llamamiento urgente para que se permita la entrada de ayuda vital y se evite la destrucción total del sistema hospitalario, que aguanta bajo mínimos.
Mientras tanto, la Unión Europea ha instado tibiamente a sus socios israelíes a “revertir la decisión de cortar la cooperación bancaria con Palestina” anunciada por el ministro de finanzas Bezalel Smotrich, advirtiendo que la medida podría devastar aún más la economía y agravar la emergencia humanitaria en la Franja. Sin embargo, Bruselas mantiene su negativa a tomar medidas decididas contra el Estado genocida.
