El Gobierno de la República Popular China ha condenado “enérgicamente” los ataques de los Estados Unidos de América contra las instalaciones nucleares iraníes de Fordow, Natanz y Esfahán, bombardeadas en la madrugada del sábado. En una declaración oficial, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino afirma que “las acciones de Estados Unidos violan gravemente los propósitos y principios de la Carta de la ONU y el derecho internacional, y han exacerbado las tensiones en Oriente Medio”.
Pekín insta a todas las partes, “Israel en particular”, a alcanzar un alto el fuego, garantizar la seguridad de los civiles y retomar el diálogo y la negociación, y reitera su disposición a cooperar con los Estados del mundo para “restaurar la paz y la estabilidad en la región”, según recoge Global Times.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores de la Federación Rusa también condena “enérgicamente” los bombardeos estadounidenses, recordando que la decisión de Washington de atacar el territorio de un Estado soberano representa una grave violación del derecho internacional, la Carta de las Naciones Unidas y las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. Moscú subraya que este tipo de acciones han sido declaradas inadmisibles por el propio Consejo de Seguridad y advierte sobre el riesgo de una escalada regional, según la agencia TASS.
Las reacciones de China y Rusia se producen en un contexto de máxima tensión tras los ataques estadounidenses a instalaciones nucleares iraníes, que han suscitado preocupación internacional por el riesgo de una escalada militar y por la seguridad de las infraestructuras nucleares bajo supervisión del OIEA. Ambas potencias han reiterado su apuesta por “el diálogo y la diplomacia como única vía para resolver la crisis”, de acuerdo con los comunicados oficiales de sus respectivos ministerios de Exteriores.
