El Gobierno español ha dado marcha atrás en su supuesta estrategia de “distanciamiento tecnológico” con el Estado genocida de Israel y ha autorizado la adquisición de tecnología militar de los sionistas para el plan de rearme de las Fuerzas Armadas, según recoge El Mundo y confirman fuentes oficiales. El cambio se produce tras reconocer que “la industria nacional no dispone actualmente de la suficiente capacidad para la fabricación y suministros de los sistemas requeridos”, en referencia al programa de Sistema de Comunicaciones de Radio Táctica (SCRT), dotado con más de 750 millones de euros en sus dos fases.
El Real Decreto aprobado este martes permite la concesión directa de préstamos para financiar nueve programas estratégicos para Defensa, entre ellos el SCRT, que implica la transferencia de tecnología de la empresa israelí Elbit System a empresas españolas como Aicox y Telefónica. El objetivo es que hasta un 90% de los equipos se fabriquen en en el Estado español, aunque la base tecnológica y los componentes clave provendrán de los territorios palestinos ocupados, según se deduce de la información del propio Ministerio de Industria en el texto legal.
Este giro llega en el contexto del compromiso del Estado español con la OTAN para alcanzar el 2% del PIB en gasto militar en 2025. Pese a las declaraciones recientes de la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcárcel, sobre un proceso de “desconexión” de la tecnología israelí, Moncloa justifica la medida por la “falta de capacidades industriales nacionales” y “la necesidad de garantizar la interoperabilidad y la soberanía tecnológica”. Además, por mucho que Pedro Sánchez lo haya negado, las compras a la entidad sionista no han cesado desde 2023; muy al contrario, han aumentado: más 10 millones de euros en armas y munición solo en el primer cuatrimestre del año, según datos oficiales.