Rusia tomará represalias contra cualquier Estado europeo que robe sus activos
Ante la posibilidad de que la UE utilice activos rusos congelados para financiar a Ucrania, Rusia anuncia acciones legales y extrajudiciales contra los países involucrados.

Este lunes 15 de septiembre, la Federación Rusa ha advertido que perseguirá “por todos los medios posibles” a cualquier Estado europeo o institución que intente confiscar sus activos congelados tras las sanciones impuestas desde el inicio de la guerra en Ucrania en 2022. Estos activos, valorados entre 300 y 350 mil millones de dólares, consisten principalmente en bonos y valores soberanos retenidos en Europa, Estados Unidos y Reino Unido. La advertencia se produce después de que la Comisión Europea explora la posibilidad de utilizar parte de estos fondos congelados para financiar un “Préstamo de Reparaciones” destinado a Ucrania, una iniciativa que ha generado tensiones legales y políticas.
Dmitri Medvedev, ex presidente ruso y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad, ha expresado en Telegram que Moscú perseguirá a los responsables, incluyendo la propia Comisión Europea y países que intenten apoderarse de estos activos, “hasta el fin del siglo”. Asimismo, indica que esta persecución se realizará tanto por vías judiciales internacionales y nacionales, como fuera de los tribunales. Medvedev califica la confiscación como un “robo” y advierte que esta acción podría socavar la confianza en los bonos y las monedas occidentales, afectando la estabilidad financiera global.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, ha defendido que los recursos derivados de los activos congelados servirán para un instrumento financiero destinado a "apoyar la defensa y la reconstrucción de Ucrania", recalcando que “Rusia debe pagar la guerra”. Los motivos de "seguridad" y la estrategia diplomática occidental mantienen esta cuestión en el centro del debate político europeo, con Estados Unidos presionando para medidas más contundentes contra Moscú, mientras varios países miembros de la UE muestran algunas reticencias o matices sobre la viabilidad y riesgos legales de estas acciones.
La disputa sobre estos activos es otra muestra de una escalada en el conflicto económico derivado de la guerra en Ucrania, sumando a las sanciones ya impuestas y las contra medidas anunciadas por Moscú.
Expertos en política internacional advierten sobre el riesgo de nuevas tensiones internacionales y el impacto que estas medidas pueden tener en los mercados financieros. Mientras tanto, el Kremlin mantiene una posición intransigente sobre la protección de su patrimonio estatal y amenaza con represalias que pueden complicar aún más el panorama geopolítico y económico en Europa y otras regiones.