El 83% de los alemanes está en contra del genocido en Gaza
La presión aumenta sobre Berlín con un 83% de la población que pide frenar envíos de armas a Israel, 62% exigiendo más presión política y el 60% respaldando reconocer a Palestina como Estado.
Una encuesta del ZDF‑Politbarometer publicada en agosto de 2025 revela que una sólida mayoría de ciudadanos alemanes se opone al genocidio que está cometiendo el Estado de Israelen Gaza. En concreto, el 86% de los votantes consideran que dicho proceder, con un número de víctimas que ya ha sido catalogado como genocidio por la ONU, no está justificado, mientras que aún hay un 10% que lo califica como "justificable".
Los hechos de los últimos meses, como la agudización de la hambruna, o que varios países occidentales hayan mostrado mayores críticas contra la entidad sionista se han visto reflejados en la encuesta: en agosto el 76% no justificaba las acciones en Gaza, y en tan solo un mes, ha crecido hasta un 83%.
Además, el 83 % de los encuestados opinan que Alemania debería dejar de entregar armas que puedan ser usadas en Gaza. Asimismo, una mayoría del 62% considera que el Gobierno alemán debe ejercer mayor presión política sobre el Estado de Israel para lograr "el fin del conflicto", frente al 30 % que se opone a este incremento de presión.
Entre jóvenes menores de 30 años, el porcentaje a favor de ejercer más persión sube a cerca del 70%, mostrando una tendencia generacional hacia mayor intervención política. En paralelo, el 60% de los alemanes respalda reconocer a Palestina como Estado, mientras que el 22% rechaza esa posibilidad.
En este contexto, una decena de países occidentales han reconocido formalmente al Estado de Palestina, lo que refuerza la presión diplomática sobre la entidad sionista y marca un ligero cambio en la política internacional.
El Gobierno alemán, por su parte, si bien mantiene su alianza estratégica con el Estado genocida de Israel y el compromiso de "seguridad conjunta", ha reiterado su apoyo a una "solución de dos Estados" y ha señalado la "necesidad de respetar los derechos humanos y la legislación internacional". Todo ello pone de manifiesto la creciente presión del movimiento propalestino que, incluso en un país tan sionista como Alemania, parece empezar a tener cierto impacto.
