El canciller alemán, Friedrich Merz, ha modificado su posición y ahora respalda la iniciativa de la Unión Europea para retirar activos rusos congelados en territorio europeo para financiar el esfuerzo militar ucraniano. En un artículo publicado en el Financial Times, Merz argumenta que esto permitiría un préstamo sin intereses de aproximadamente 140.000 millones de euros, destinado a asegurar la capacidad militar de Ucrania en los próximos años, "sin afectar los derechos de propiedad de Rusia", y condicionado a que "Moscú compense a Ucrania por los daños causados durante el conflicto".

El planteamiento contempla que la garantía inicial del préstamo la proporcionen los Estados miembros, y que posteriormente el respaldo provenga del presupuesto plurianual de la UE a partir de 2028. El préstamo se destinaría exclusivamente a equipamiento militar y no para cubrir gastos generales del Gobierno ucraniano, con decisiones conjuntas entre Kiev y los países europeos sobre las compras. Merz subraya "la necesidad de que una mayoría amplia de Estados miembros respalde la medida", ante posibles rechazos o reticencias de algunos países, como Hungría o Eslovaquia.

La propuesta llega en un contexto de "revisiones jurídicas y políticas" en varios países europeos, incluido Alemania, donde antes existía temor por las implicaciones legales de la "confiscación directa" de activos. La Comisión Europea examina opciones para explotar los 194.000 millones de euros en activos rusos retenidos en Euroclear, con aportes previos en forma de réditos y préstamos parciales para Ucrania sin tocar el capital principal.

Este cambio de postura coincide con la reducción de apoyo estadounidense bajo la administración Trump y la presión por parte de Berlín, cuyo gobierno de coalición lidera el respaldo financiero y militar a Ucrania en Europa. La iniciativa, por tanto, apunta también a fortalecer la propia industria europea militar mediante las compras coordinadas pagadas con fondos rusos.

Paralelamente, la Presidencia danesa del Consejo de la UE espera presentar una propuesta detallada en octubre para avanzar en un mecanismo que redoble la presión económica sobre Rusia y contribuya a seguir con la guerra de Ucrania.

Postura de Rusia

A mitades de septiembre, Moscú advirtió que tomará represalias contra cualquier Estado europeo que robe sus activos, amenazando con acciones legales y extrajudiciales contra los países involucrados y advirtiendo que esta acción podría socavar la confianza en los bonos y las monedas occidentales, afectando la estabilidad financiera global.