El precio de las reservas de oro del Tesoro de Estados Unidos superó este lunes el billón de dólares, después de que el precio de la onza alcanzara un máximo histórico de 3.824,5 dólares. Este aumento, cercano al 45% en los últimos 12 meses, responde a una creciente demanda de activos refugio debido a la incertidumbre derivada de la guerra comercial, la política fiscal del Gobierno de Donald Trump, recientes reducciones de las tasas de interés y el clima político interno de la principal economía mundial, según reportan EFE y Swissinfo.

Aunque la reserva estadounidense es la mayor del mundo, su precio oficial sigue siendo de unos 11.000 millones de dólares, calculado a un precio fijado en 1973 por el Congreso estadounidense. Esta diferencia muestra que, pese a la revalorización en el mercado, el Tesoro no ha actualizado el valor contable de sus reservas, evitando así impactos sobre la volatilidad en los mercados financieros y las finanzas públicas.

Especialistas señalan que la escalada del oro responde a "un aumento en la demanda por parte de bancos centrales, inversionistas institucionales y hogares en regiones como China y Oriente Medio", que han incrementado sus compras.

Aunque a principios de 2025 se barajó la posibilidad de una revaluación del metal por parte del Gobierno Trump, propuesta descartada oficialmente por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, la tendencia alcista se mantiene ante las tensiones geopolíticas, el incremento del déficit fiscal estadounidense y la búsqueda de protección frente a la volatilidad de otros activos financieros.