Pegasus: ¿Qué le debe Sánchez a Israel?
La infección del spyware israelí en el teléfono del presidente español en 2021 alimenta dudas sobre la política exterior hacia el Sáhara y Palestina.

En 2021, el teléfono del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, fue infectado con Pegasus, un software espía desarrollado por la empresa israelí NSO Group, una empresa que varios informes vinculan a los servicios de inteligencia israelíes. Este software espía extrajo 2,6 gigas de datos del teléfono del presidente español, incluyendo comunicaciones y archivos personales. La investigación judicial sobre el caso, reabierta tras denuncias y cooperación limitada, sigue sin identificar a los responsables, pese a que sectores de la derecha apuntaban a Marruecos como posible autor del ataque, hipótesis que el país vecino ha negado.
Informes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) español han advertido de un "alto riesgo" de que el Estado de Israel acceda a toda la información extraída con Pegasus, ya que varios expertos señalan que NSO comparte datos con el Mossad para fines de "contraespionaje" o "intereses nacionales". Esto incluye fotos, mensajes de WhatsApp, correos electrónicos, apps como Threema y datos bancarios sensibles de Sánchez y su entorno. Si Israel posee esta información, sería susceptible de ser utilizada ante críticas severas o medidas que pudiera adoptar Moncloa hacia Tel Aviv, revelando datos sobre corrupción en las tramas de su esposa Begoña Gómez, su hermano David Sánchez, Santos Cerdán, Koldo y José Luis Ábalos. En mayo de 2025, el embajador israelí advirtió que, ante los "ataques constantes" de Sánchez, Israel "aún no ha respondido con revelaciones de Pegasus".
Pocos meses después de la infección, en marzo de 2022, Sánchez apoyó el plan marroquí de "autonomía" para el Sahara Occidental que consolida la ocupación ilegal, abandonando una histórica y aparente "neutralidad" con un golpe de timón en la política exterior que alteró las relaciones con Argelia.
Un año más tarde, mientras el Estado español se convertía en el cliente número uno en la compra de armamento israelí de la UE, el presidente iba endurecido sus formas retóricas hacia el Estado de Israel, llegando a hacer gestos simbólicos como reconocer al Estado palestino en 2024; movimientos que, según analistas críticos, sirven a funciones políticas de "distracción interna" y para "desviar la atención" de escándalos de corrupción en el PSOE.
La investigación judicial, obstaculizada por la falta de colaboración del Estado de Israel, sigue abierta en el Estado español, con apoyo de investigadores franceses que colaboran con datos técnicos. La naturaleza del spyware, diseñado para borrar rastros y ocultar actividad, dificulta la identificación exacta de los atacantes y la comprobación de los usos del material extraído. El debate sobre el alcance de la influencia de Pegasus en decisiones de Estado continúa sin resolverse, pero sigue generando sospechas, a la luz de los hechos.
Este miércoles, 1 de octubre, Moncloa solicitó a la flotilla que no entrara en la zona de exclusión impuesta por el Estado Israel, justificando la petición en "la seguridad" de las personas involucradas. La petición de Sánchez fue interpretada desde varios sectores como un intento de evitar un enfrentamiento diplomático directo con los sionistas y mantener cierta estabilidad en las relaciones bilaterales, lo que vuelve poner sobre la mesa el temor de Madrid a las autoridades israelíes, una cuestión de la que se habla de forma explícita en cabeceras israelíes como The Times of Israel.