El PSOE intenta tapar su complicidad con Israel y la corrupción participando en las manifestaciones por Palestina
María Chivite hizo acto de presencia en la manifestación de Iruñea en favor de la resistencia palestina y por la disolución de Israel; manifestantes la abuchearon y señalaron su complicidad con el genocidio.

El pasado fin de semana, varios cargos políticos del PSOE acudieron a las manifestaciones propalestinas que se efectuaron en múltiples ciudades del Estado español, y las aplaudieron en sus perfiles de redes sociales. En un momento en el que las encuestas muestran que los gestos "en favor de Palestina" están favoreciendo electoralmente al partido gobernante, voces críticas señalan la responsabilidad del partido encabezado por Pedro Sánchez en la masacre que está sufriendo el pueblo palestino, al mantener en pie los lazos políticos, económicos, militares y diplomáticos con el Estado de Israel
Además, estos gestos coinciden en el tiempo con varias causas de corrupción abiertas que apuntan directamente a la cúpula del PSOE y al círculo más íntimo de Sánchez, por lo que hay quien señala cierta instrumentalización de la causa palestina para los intereses partidistas de Ferraz.


Oscar López, Ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública del Gobierno español.
Uno de los episodios más llamativos del fin de semana sucedió en Iruñea (Nafarroa), el sábado al mediodía. En la capital navarra, epicentro de la trama de Santos Cerdán, la plataforma Palestinarekin Elkartasuna había convocado una manifestación por Palestina, pero no una cualquiera: el lema de la convocatoria era Palestinar erresistentzia aurrera, Israel desegin (Adelante la resistencia palestina, deshacer Israel).
A aquella manifestación se personó María Chivite, presidenta de la Comunidad Foral de Navarra y secretaria general del PSN. Testigos confirman que algunos manifestantes, al comprobar que la presidenta navarra había acudido a la movilización, empezaron a abuchearla y a corear "Gobierno progresista, cómplice sionista".

Su presencia en la protesta ha sido señalada como oportunista porque las proclamas de la manifestación difieren radicalmente de la postura oficial del PSOE sobre la cuestión palestina: en el acto final, donde se quemó una bandera de Israel, reivindicaron abiertamente la inviabilidad de la "solución de los dos estados" y señalaron la disolución del Estado de Israel y la descolonización total de Palestina como única solución: "Hoy alzamos la voz a favor de la resistencia palestina en todas sus formas; alzamos la voz para remarcar la necesidad de la descolonización de toda Palestina y el desmantelamiento de la entidad terrorista israelí; y alzamos la voz contra todas las complicidades con el sionismo", afirmaban en el comunicado final.
También hicieron un llamamiento a los sindicatos para convocar una huelga general en Euskal Herria que sirva para señalar y presionar a las instituciones cómplices, especialmente al Gobierno español.