El Ayuntamiento de Palma asciende a un policía torturador condenado
La Policía Local de Palma recupera como oficial a Antonio G., quien en 2011 propinó tres patadas en la cabeza a un hombre inmovilizado en el cuartel.
El Ayuntamiento de Palma (Mallorca, Illes Balears) ha decidido ascender a la categoría de oficial a Antonio G., el policía local condenado por la Audiencia en 2011 por torturar a un detenido en el cuartel de Sant Ferran. Según recordaba el pasado 15 de noviembre el Diario de Mallorca, el agente propinó tres patadas en la cabeza a un hombre que se encontraba esposado a un banco e inmovilizado, una agresión que fue grabada por las cámaras de seguridad y se convirtió en la prueba clave del caso.
Antonio G., experto en artes marciales, recuperó su condición de funcionario tras cumplir la pena de suspensión y superar las oposiciones convocadas por el Ayuntamiento de Palma en 2023, incorporándose como agente de base. Ahora, la regidora de Función Pública y el jefe de la Policía Local, Guillem Mascaró, han avalado la rehabilitación como oficial al policía torturador, categoría que le permite dar órdenes y dirigir a otros agentes sin haber superado una oposición interna específica.
El consistorio, consultado por el medio, justificó la decisión basándose en el Real Decreto 2669/1998 y argumentó que "el interesado ha cumplido íntegramente la condena" y que existen "informes favorables" que avalan la rehabilitación del agente torturador. La respuesta municipal no mencionó en ningún momento los hechos concretos por los que fue condenado: la violenta contra un detenido inmovilizado.
El caso sienta un precedente al tratarse de un violento agente cuya condena por torturas fue firme, y que ahora recupera una categoría superior con mayores competencias sancionadoras y de detención sobre la población.