Una "ONG" fantasma con fondos opacos organiza salidas silenciosas de gazatíes
'Al-Majd Europe', una organización alemana sin sede operativa, canaliza evacuaciones no trazadas desde Gaza hacia destinos desconocidos en África y Asia desde el aeropuerto militar israelí de Ramon.
Una organización fantasma denominada Al-Majd Europe, registrada en Alemania pero sin sede operativa verificable, está coordinando la salida de habitantes de Gaza a través del aeropuerto israelí de Ramon, en un operativo de evacuación opaco y no monitorizado internacionalmente. Según ha podido comprobar el diario italiano il Manifesto, la "ONG" utiliza imágenes generadas por inteligencia artificial en su web, su correo electrónico no funciona y no existe rastro de proyectos previos.
Testimonios recogidos por Al Jazeera, Associated Press y algunos medios sudafricanos precisan que la organización, tras haber ofrecido "evacuaciones gratuitas" inicialmente, empezó a exigir entre 1.500 y 5.000 dólares por persona. Una joven madre de Deir al-Balah declaró: "Nos dijeron que sin pagar 3.500 dólares no saldríamos. Vendí el oro de mi madre".
Los vuelos, operados por compañías charter de Europa del Este, despegan desde el aeropuerto Ramon operado por la ocupación israelí con escalas en Budapest (Hungría) o Bucarest (Rumanía) y destinos finales como Sudáfrica, Malasia o Indonesia, muchas veces sin que los pasajeros conozcan su destino final.
¿Vaciado demográfico silencioso de Gaza?
La operación salió a la luz cuando un vuelo charter aterrizó en Sudáfrica con 153 palestinos a bordo. El gobierno de Cyril Ramaphosa calificó el arribo de "misterioso" y "no coordinado", reteniendo a los pasajeros en la pista por falta de documentación válida. Analistas citados por medios árabes como Al-Quds al-Arabi y Felesteen sostienen que este sistema de evacuaciones paralelas podría facilitar un plan político de vaciado demográfico de la Franja, al trasladar personas sin supervisión de la ONU o UNRWA.
Un ex funcionario del Ministerio de Seguridad Pública de la entidad sionista, bajo anonimato, declaró que "Ramon ha sido utilizado como un laboratorio operativo, una zona gris donde experimentar formas de gestión de la población fuera de los protocolos oficiales". La falta de transparencia y la ruta elegida evitan la supervisión internacional que tendría lugar si las evacuaciones se hicieran a través de cruces fronterizos convencionales como los de Jordania o Egipto.