Las formaciones de izquierda "alternativa" en Aragón no han logrado alcanzar un acuerdo para presentar una candidatura unitaria en las elecciones autonómicas convocadas para el 8 de febrero de 2026. Tras intensas negociaciones que se prolongaron hasta el último día del plazo legal para registrar coaliciones, este viernes, el espacio político acudirá fragmentado con al menos tres listas independientes: la Chunta Aragonesista (CHA), Podemos e Izquierda Unida junto a Movimiento Sumar.

Los contactos 'in extremis' entre las distintas fuerzas no han prosperado, en medio de acusaciones mutuas de vetos cruzados, filtraciones y falta de voluntad para establecer una mesa de negociación conjunta. Fuentes de las formaciones implicadas coinciden en señalar que las tensiones existentes a nivel estatal se han trasladado al ámbito autonómico, frustrando la posibilidad de replicar experiencias como la de Unidas por Extremadura, que obtuvo un resultado mejor en los comicios del 21 de diciembre en esa comunidad.

La Chunta Aragonesista fue la primera en dar por cerrada cualquier posibilidad de unidad. Esta mañana, la formación nacionalista aragonesa criticó la ausencia de una mesa de diálogo conjunta que incluyera a todas las partes  y reprochó los "vetos cruzados" impulsados desde las direcciones estatales. Fuentes de CHA hablaron de "Juegos de Tronos" desde Madrid que impedían un acuerdo real. La candidatura de Chunta estará encabezada por el diputado en el Congreso Jorge Pueyo, adscrito al grupo de Sumar, quien optará a la presidencia del Gobierno de Aragón y liderará la lista por Zaragoza. 

Por su parte, Podemos confirmó esta noche su decisión de presentarse en solitario, defendiendo que su lista es "imprescindible" y "nítidamente de izquierdas" frente a lo que consideran una "deriva del PSOE". La formación morada lamentó que el resto de partidos no aceptaran su propuesta de emular la coalición extremeña, donde IU, Podemos y Alianza Verde concurrieron sin Sumar, y lanzó un mensaje implícito a Izquierda Unida por no secundar esa opción. Algunas voces apuntan a que la posición de la dirección estatal de Podemos, contraria a incluir a Movimiento Sumar, al que considera un proyecto "fracasado y subordinado al PSOE", fue determinante en el fracaso del pacto, aunque desde Podemos lo desmienten y afriman que son filtraciones del entorno de Sumar para dinamitar el pacto.

Izquierda Unida y Movimiento Sumar, aliados a nivel estatal, han formalizado esta noche su coalición para Aragón, presentándola como la "unidad posible y real". Ambas formaciones subrayan que su objetivo es ensanchar el espacio de la izquierda alternativa en la comunidad. La candidatura, cuyos detalles se darán a conocer este sábado en Zaragoza, competirá electoralmente contra Podemos y Chunta, pese a compartir grupo parlamentario en el Congreso con representantes de estas fuerzas.

Con esta división, Aragón repite el escenario de las elecciones autonómicas de 2023, en las que CHA, IU y Podemos ya concurrieron por separado. Tampoco prosperó la posibilidad de un acuerdo puntual en la circunscripción de Teruel, donde se especuló con un ensayo de unidad para intentar arrebatar un escaño al PP que podría resultar decisivo. Fuentes de IU indicaron que, dada la "demografía aragonesa", la fragmentación penaliza "menos que en otras comunidades", ya que la mayoría de escaños se reparten en Zaragoza.