El Grupo Socialista y Fratelli d’Italia podrían pactar en el Parlamento Europeo: se han mostrado dispuestos a apoyar al candidato de Giorgia Meloni, Raffaele Fitto, a cambio de ocupar la vicepresidencia de Cohesión y Reformas de la Comisión Europea. Este posible respaldo vendría en intercambio por el apoyo a Teresa Ribera, candidata española del PSOE.
La decisión surge con la meta de consolidar la nueva Comisión de Ursula von der Leyen, cuyo inicio está programado para el 1 de diciembre de 2024. Las fuentes del gobierno español se excusan ante EFE con que “es crucial evitar bloqueos internos que retrasen el inicio de este nuevo equipo directivo europeo en contexto geopolítico complejo”. La situación de bloqueo empezó el 12 de noviembre, cuando la Eurocámara pospuso la evaluación de seis candidatos a vicepresidentes ejecutivos, incluidos Fitto y Ribera, debido a los vetos cruzados entre los grupos de los populares, socialistas y otros partidos. Además del caso de Ribera, el líder del Partido Popular Europeo (PPE) ha insistido en excluir de la Comisión al candidato húngaro Olivér Várhelyi, cercano a Viktor Orbán y rechazado por la izquierda europea. Este contexto ha llevado al Partido de Los Socialistas Europeos a considerar este intercambio de apoyos con la extrema derecha.
Para el PPE, liderado por el democristiano Peter Liese y que por ahora veta a Ribera, apoyar a la candidata dependería de que ella realice algunas concesiones en su cartera, como “medidas a favor del sector agrícola e industrial”, en línea con los intereses del bloque conservador. El 20 de noviembre, Ribera comparecerá ante el Congreso español para esclarecer su papel en la gestión de la DANA, momento que podría resultar decisivo para su confirmación. Si los líderes de los principales grupos en la Eurocámara lograran llegar a un acuerdo durante la Conferencia de Presidentes programada para ese día, la votación final de la nueva Comisión se celebraría el 27 de noviembre.