El Sindicato CCOO ha decidido desconvocar la huelga prevista para este jueves 5 de diciembre en el sector de conductores de autobuses, pero mantiene por ahora la convocatoria para el próximo lunes 9 de diciembre, así como la huelga indefinida a partir del 23 de diciembre. Esta decisión llega después de que no se hayan logrado avances significativos en las negociaciones sobre la jubilación anticipada por causas de peligrosidad, una reivindicación que subrayan muchos trabajadores del sector. Mientras que UGT ya firmó un acuerdo con las principales patronales para solicitar la jubilación anticipada a las administraciones, CCOO continúa con las movilizaciones debido a la falta de una fecha concreta para la implementación de esta medida.
El sindicato critica a las patronales del transporte, dominadas por empresas como Alsa y Avanza, “por su falta de compromiso en la resolución del conflicto”. CCOO acusa a estas patronales de anteponer sus intereses económicos a las necesidades de los trabajadores, buscando que la nueva normativa sobre jubilación anticipada implique requisitos más estrictos que dificulten el acceso a los coeficientes reductores para los conductores. Además, aseguran que Confebús intenta trasladar el coste adicional de la medida a la administración, en lugar de asumirlo las propias empresas.
Ante esta situación, CCOO insta a los ayuntamientos de las principales ciudades y al Ministerio de Transportes “para que intervengan y tutelen el proceso de solicitud de la jubilación anticipada”. El sindicato recuerda que, aunque los trabajadores estén en huelga y no presten servicio, las concesionarias siguen cobrando por la concesión, “lo que demuestra la falta de responsabilidad de las patronales en la resolución del conflicto”.