La empresa de plásticos Inma, en Archidona (Málaga), inició a finales de noviembre huelga indefinida reclamando mejoras en las condiciones laborales, según informó la Cadena SER. Por su parte, los trabajadores del sector naval en Ferrol (A Coruña, Galiza) endurecieron su postura con una huelga indefinida hasta el viernes 29 de noviembre para exigir una renovación en el convenio y denunciando amenazas por parte de la patronal, tal como señaló la misma fuente.
En el sector de los servicios y la logística, en A Coruña (Galiza), los empleados de los centros deportivos llevaron a cabo una nueva jornada de huelga a finales de noviembre, con un seguimiento que alcanzó casi el 100%, según publicó El Español. En paralelo, Diario de Arousa informó a finales de noviembre de que más de 50 trabajadores continuaron las protestas en el Hotel Balneario de La Toja de Arousa (Pontevedra, Galiza), denunciando los despidos que la empresa pretende llevar a cabo.
Además, la empresa logística Katoen Natie, vinculada a Solvay, vivió la primera jornada de huelga el 25 de noviembre. Los trabajadores de la empresa situada en Torrelavega (Cantabria) demandan mejoras salariales y trabajar en condiciones más seguras, según reportó Esto es Torrelavega. En Vitoria-Gasteiz (Araba, Euskal Herria), Gedar Langile Kazeta informaba de que los trabajadores del sector hostelero convocaron una huelga y una protesta el 3 de diciembre, por la falta de actualización salarial durante los últimos cinco años y las condiciones del nuevo convenio colectivo.
En el sector público, el servicio de ambulancias DIAVIDA de Cantabria continuaba con la huelga a finales de noviembre, tras fracasar las negociaciones, según informó la UGT Cantabria. Mientras tanto, los autobuses urbanos en Zaragoza afrontaban paros laborales convocados en la última semana de noviembre por el sindicato SATTRA, que impactarán en el servicio durante diciembre, según informó Hoy Aragón.
En el matadero Litera Meat de Binéfar (Aragón), uno de los más grandes de Europa y del mundo, está convocada una huelga para los días 10, 11, 12 y 13 de diciembre. La planta, que sacrifica 900 cerdos al día y hasta 160.000 a la semana, funciona gracias a un sistema industrial de alta tecnología sostenido por la sobreexplotación de 1.600 trabajadores, en su mayoría migrantes. El sindicato CNT ha liderado esta convocatoria como respuesta a años de condiciones laborales abusivas en el sector.