Este domingo, miles de personas se manifestaron en Santiago de Compostela (A Coruña, Galiza) para expresar su rechazo al proyecto de instalación de una macroplanta de celulosa en Palas de Rei (Lugo), promovida por la empresa portuguesa Altri y la gallega Greenalia. Los manifestantes, apoyados por diversas plataformas sociales, sindicatos y partidos políticos de la oposición, criticaron el impacto ambiental del proyecto, que afectaría el corazón natural de Galiza.
Aseguraron que sectores como el agroganadero, pesquero y turístico se verían “seriamente perjudicados”, y exigieron que la Xunta de Galicia detuviera el proyecto “en defensa del medio ambiente y las futuras generaciones”. Los lemas más repetidos fueron “Altri No” y “Rueda recula, el agua no es tuya”, en referencia al presidente gallego Alfonso Ruedan. La protesta, que transcurrió en un ambiente festivo, fue calificada como “histórica” por los organizadores.
Los participantes también manifestaron su oposición a un modelo industrial que consideraban destructivo para el territorio y generador de altos riesgos de contaminación. La movilización contó con la participación de sectores rurales, ecologistas y vecinos, quienes defendieron el futuro de los recursos naturales de Galicia, especialmente el Río Ulla y la Ría de Arousa .
Altri, por su parte, defendió su negocio, asegurando que había sido diseñado “bajo los más estrictos estándares de sostenibilidad y respetando la normativa europea”. A pesar de las supuestas garantías ofrecidas por la empresa, la oposición a la planta continúa creciendo en Galicia, con manifestantes y grupos ecologistas advirtiendo sobre los efectos nocivos que el vertido de residuos químicos podría tener sobre el medio ambiente y las economías locales .
