Este lunes, el parlamento de Azerbaiyán aprobó su presupuesto estatal para 2025, con una notable alza en el gasto destinado a “defensa y seguridad nacional”. En comparación con el presupuesto de 2024, la asignación para el sector militar aumenta en 2.500 millones de manats (aproximadamente 2.350 millones de euros). La cifra total prevista para defensa es de 5.000 millones de manats, lo que representa un incremento del 19% con respecto al año anterior, según ha informado la agencia Reuters. Este aumento se ha justificado por “la necesidad de contrarrestar la creciente actividad militar de Armenia en la región”, según fuentes oficiales.
Este fuerte aumento en el gasto militar coincide con un contexto de creciente tensión en el Cáucaso y un significativo incremento en las importaciones de armamento. Recientemente, Azerbaiyán ha recibido entregas de armas provenientes de Serbia, Bulgaria y el Estado de Israel, como ha revelado el periodista David Galstyan. Las nuevas rutas de transporte, organizadas por la empresa ucraniana Motor Sich, permiten que Azerbaiyán mantenga una logística aérea más eficiente, especialmente en las rutas que conectan ciudades como Burgas, Niš y Bakú.
A pesar de la subida en el presupuesto militar, el gobierno de Azerbaiyán enfrenta un déficit fiscal de 1.820 millones de euros, debido a un aumento generalizado del gasto, proyectado para 2025. La economía del país sigue siendo impulsada principalmente por sus exportaciones de petróleo, con una previsión de crecimiento del PIB del 3.5% para 2025, aunque las tensiones en la región continúan ejerciendo presión sobre su estabilidad económica y política.