Las fuerzas israelíes han llevado a cabo nuevos ataques aéreos en Gaza el 23 de diciembre, matando al menos a 11 palestinos en la zona de al-Mawasi, según informa Al Jazeera. Siete de las víctimas murieron en un primer ataque, mientras que otras cuatro fallecieron en dos incursiones posteriores. La región de al-Mawasi había sido designada anteriormente como una “zona segura” para los desplazados.
El jefe de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) condena la escalada de violencia, señalando que los ataques contra hospitales y escuelas se han vuelto habituales. En el hospital Kamal Adwan, en el norte de Gaza, el director advirtió que evacuar el centro, como exige el Estado de Israel, “sería prácticamente imposible debido a la presencia de casi 400 civiles, incluidos bebés en incubadoras”.
Mientras tanto, en Cisjordania, tres palestinos resultaron heridos y decenas fueron arrestados durante nuevas redadas israelíes en el campo de refugiados de Qalandiya y en Fawwar, al sur de Hebrón, informó la agencia Wafa. Las operaciones militares israelíes también se extendieron al sur de Líbano, donde bombardearon la localidad de Kfar Kila, violando un alto el fuego acordado el mes anterior.
