Los fondos de inversión, que van ampliado su dominio económico en el negocio inmobiliario, también ponen el ojo en el sector agrario. En un artículo publicado este lunes, El Salto destaca unos datos de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG): desde 2019, cerca de 900 fondos de capital riesgo controlan tierras de cultivo valoradas en más de 100.000 millones de euros en el Estado español. Esta tendencia hacia la concentración monopolística, que se da también en el campo, se ha intensificado con la llegada de fondos especulativos internacionales.
Desde la COAG advierten que esta tendencia está dificultando el acceso de los jóvenes agricultores al sector, ya que no pueden competir con los grandes capitales a la hora de adquirir tierras o derechos de agua, mientras que los pequeños agricultores tienen que afrontar unos costes que han aumentado en un 92% y unos ingresos que han crecido un 49%. Según el Ministerio de Agricultura del Gobierno español, el 6,6% de las empresas agrarias ya concentran el 42% del valor de la producción agrícola en el estado.
