Los casos de infiltración de agentes de la Policía Nacional española en movimientos sociales y políticos en Catalunya, el País Valencià y Madrid han vuelto a ser noticia tras la publicación de nuevos detalles exclusivos de algunos casos por parte La Directa y la emisión de un reportaje en TV3. Desde 2022, diversos medios de tendencia de izquierda e independentista han sacado a la luz varios episodios de infiltración en colectivos políticos y sociales, especialmente en Catalunya, donde la Policía Nacional española y la Guardia Civil han intensificado sus esfuerzos por obtener información sobre movimientos relacionados con el independentismo y movimientos sociales desde el referéndum de 2017. Estos casos han revelado detalles sobre los agentes infiltrados, como sus nombres, orígenes y el modo en que operaban.
La infiltración de agentes comenzó como parte de las respuestas a la situación política y social derivada del referéndum de 2017 y las protestas que siguieron, movilizando a la Policía Nacional española y a la Guardia Civil en la monitorización de diversos colectivos en Catalunya. Además, otros infiltrados han sido destapados en Madrid y el País Valencià, y según reveló La Directa recientemente, una infiltrada admitió que los agentes encubiertos están por todo el Estado, no solo en Catalunya.
Sin embargo, tras la revelación de varios casos, algunos mandos de la Policía Nacional española habrían confesado a El Confidencial Digital que “infiltrar agentes en estos grupos podría ser más arriesgado que optar por la captación de confidentes”, debido a que “la seguridad del agente queda en riesgo si su identidad se ve comprometida”, aseguran las fuentes policiales. Al parecer, la publicación de la identidad real y los rostros de estos agentes ha surtido efecto en las filas de la policía. Por ello, en lugar de las infiltraciones, algunos mandos sugieren “la captación de personas dentro de estos movimientos para obtener información de forma más segura y eficiente”.
A pesar de la controversia interna sobre la efectividad y los riesgos de las infiltraciones, la captación de confidentes sigue siendo una práctica habitual en las diferntes investigaciones de los servicios de inteligencia y seguridad.
