El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco ha confirmado que “sigue investigando” la detención de Karen Daniela Agredo Palacio, quien fue arrestada por la Ertzaintza en Donostia el pasado 1 de febrero y tuvo que ser hospitalizada con una hemorragia cerebral por lesiones durante la detención. A pesar de la gravedad del caso, el consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, ha declarado que no se tomarán medidas contra los agentes implicados “hasta que se esclarezcan los hechos”: “Mientras no tengamos certeza sobre si se actuó bien o mal, creo que no podemos tomar ninguna decisión”, afirmó.
El incidente ocurrió a la salida de una discoteca en el centro de la ciudad. Según testigos citados por diario colombiano El País, la mujer intervino mientras los agentes detenían a su pareja y recibió un empujón que la hizo caer y golpearse la cabeza, quedando inconsciente. Su familia ha denunciado que, tras ser trasladada a comisaría, sufrió más agresiones antes de ser ingresada en el hospital. El parte médico describe lesiones graves, incluyendo un hematoma cerebral, y aunque ya ha recibido el alta, tanto sus allegados como organizaciones sociales han expresado preocupación por la actuación policial. La lesión le ha dejado secuelas como la parálisis en varias partes del cuerpo.
El Gobierno Vasco ha trasladado el caso a la Comisión de Control y Transparencia de la Ertzaintza para su análisis. No obstante, la falta de medidas cautelares contra los agentes ha generado críticas. “Nuestra responsabilidad es garantizar las mejores condiciones para la Ertzaintza y que todas las intervenciones sigan los procedimientos establecidos”, aseguró Zupiria. Mientras tanto, la víctima ha presentado una denuncia y la investigación interna de la policía autonómica sigue en curso.