Una niña de unos 10 años fue atropellada el pasado lunes alrededor de las 13:30 horas en el paseo de Extremadura por un coche no identificado como policial en el que viajaba el director general de la Policía Municipal de Madrid, Pablo Enrique Rodríguez, como copiloto.
Según relata El País, al volante se encontraba un inspector que habitualmente actúa como su chófer. El accidente ocurrió durante el apagón que afectó a varios semáforos de la capital. La menor, que cruzaba la vía de la mano de su madre fuera del paso de cebra, sufrió una contusión leve en la pierna y fue atendida por los servicios del Samur en el lugar.
Numerosos testigos presenciaron el suceso y relataron al citado medio que el vehículo circulaba por el carril bus-taxi a una velocidad elevada. Al detenerse el coche tras el atropello, varios peatones increparon al conductor por la velocidad. Rodríguez, tras salir del vehículo y ver a testigos grabando con sus móviles, regresó al interior, según relatan testigos a El País. Minutos después, acudieron al lugar una ambulancia del Samur y otro coche policial sin distintivos. La niña abandonó el lugar caminando acompañada por su madre.
A pesar de la intervención de los servicios de emergencia, el incidente no figura en las bases de datos oficiales del Samur ni en la del sistema policial municipal, donde debería haberse registrado conforme a la instrucción 4/2003, que establece un plazo máximo de 24 horas para la introducción de este tipo de datos.
Un portavoz de la Policía Municipal confirmó a El País que hubo un accidente en el lugar, pero argumentó que “aún no disponen del Parte Estadístico de Accidentes” y que “podría tardar hasta 10 días”, una demora que fuentes policiales consultadas por el mismo diario califican de anómala. El Ayuntamiento no ha ofrecido más detalles, y los responsables del vehículo implicado no han respondido a las solicitudes de información del medio.
