La Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha alertado este miércoles de que la Tierra se enfrenta a cinco años consecutivos de temperaturas récord o cercanas a los máximos históricos, según su último informe anual sobre predicciones climáticas.
El documento pronostica que la temperatura media anual global para cada año entre 2025 y 2029 será entre 1,2 ºC y 1,9 ºC superior a la media preindustrial (1850-1900), acercando al planeta al umbral crítico de 1,5 ºC fijado en el Acuerdo de París.
El informe eleva al 70% la probabilidad de que el calentamiento promedio del lustro 2025-2029 supere los 1,5ºC, un aumento significativo respecto al 47% estimado el año pasado para el periodo 2024-2028.
Además, existe un 80% de posibilidades de que al menos uno de esos años sea el más cálido jamás registrado, superando el récord actual de 2024, y un 86% de que al menos un año supere en más de 1,5 ºC el nivel preindustrial.
La OMM advierte que cada “fracción adicional de calentamiento intensifica los riesgos”: olas de calor más severas, lluvias extremas, sequías, derretimiento de hielo y glaciares, calentamiento oceánico y aumento del nivel del mar.
El Ártico será especialmente vulnerable, con inviernos que podrían ser hasta 2,4 ºC más cálidos que la media reciente y una reducción significativa del hielo marino en los mares de Barents, Bering y Ojotsk.
En cuanto a las precipitaciones, el informe prevé condiciones más húmedas en el Sahel, el norte de Europa, Alaska y el norte de Siberia, y más secas en la Amazonia durante la temporada de mayo a septiembre. El sur de Asia, por su parte, continuará experimentando años más húmedos que la media, salvo excepciones puntuales.
La vicesecretaria general de la OMM, Ko Barrett, ha subrayado que “acabamos de vivir los diez años más cálidos registrados” y que el informe “no ofrece señales de mejora en los próximos años, lo que significa un impacto negativo creciente en nuestras economías, nuestra vida cotidiana, nuestros ecosistemas y nuestro planeta”.
El informe recuerda que el objetivo de 1,5 ºC del Acuerdo de París se refiere a un promedio a largo plazo, pero advierte que las superaciones temporales de ese umbral “serán cada vez más frecuentes” a medida que el calentamiento global se acerque a ese nivel crítico.