Bruselas activa la revisión del acuerdo comercial con Israel

El proceso busca “evaluar” las violaciones de derechos humanos y podría derivar en suspensiones parciales o totales del tratado, aunque su aplicación depende del consenso entre los Estados miembros de la UE.

Reunión ministerial G5+ de la UE, imagen de archivo.
Foto: @kajakallas (X)

La Comisión Europea ha iniciado formalmente la “revisión” del acuerdo comercial con el Estado de Israel, a petición de una mayoría de Estados miembros impulsada por una propuesta de Países Bajos, según informa Eldiario.es.

Kaja Kallas, alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, ha confirmado en rueda de prensa que los trabajos están en marcha internamente y que el objetivo es que en la próxima reunión de ministros de Exteriores, prevista para el 23 de junio, se presenten “opciones” para decidir el futuro del acuerdo.

La iniciativa busca abordar denuncias sobre violaciones de derechos humanos en la Franja de Gaza, aunque no hay consenso suficiente para medidas como la suspensión parcial del tratado.

La división interna se mantiene evidente, con países como Alemania o el Estado español posicionándose en términos aparentemente opuestos respecto al Estado de Israel.

Alemania se opuso inicialmente a evaluar la situación de derechos humanos en Gaza pero ha elevado el tono contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reconociendo que “la violencia que está perpetrando no se justifica en su derecho a la autodefensa”, señala eldiario.es.

Ursula Von der Leyen, presidenta de la Comisión, también condenó el uso “desproporcionado de la fuerza contra civiles” y calificó como “abominable” la destrucción de infraestructuras civiles, incluyendo escuelas y refugios, durante la ofensiva en Gaza.

El presidente español, Pedro Sánchez, ha abogado en Bruselas por “aumentar la presión sobre Israel” para detenga las atrocidades, reclamando “la suspensión del Acuerdo de Asociación y la imposición de sanciones, incluido un embargo de armas”, según declaraciones emitidas desde la Moncloa.

Sin embargo, más a allá de los gestos formales, lo cierto es que el Gobierno español, de tener voluntad política para ello, podría decretar un embargo de armas a los sionistas desde el Consejo de Ministros, sin esperar a aprobar nuevas leyes o al beneplácito de sus vecinos europeos.

La alta representante Kallas reiteró “la exigencia de un alto el fuego, la liberación de rehenes y el fin permanente de las hostilidades mediante negociaciones”, pero sin interponer medidas concretas, aunque tengan potestad de hacerlo. Rusia, por ejemplo, ya ha recibido el 17º paquete de sanciones por parte de Bruselas.

Kallas también “critica” la instrumentalización de la ayuda humanitaria bloqueada por el Estado de Israel y “rechaza” verbalmente la propuesta de Netanyahu de privatizar su distribución, pero sin un plan de sanciones al respecto sobre la mesa.