El líder supremo de la República Islámica Irán, Ali Khamenei, ha advertido en un mensaje televisado que Irán “no aceptará una guerra ni una paz impuestas” y que cualquier ataque militar estadounidense sobre territorio iraní tendrá “consecuencias serias e irreparables”.
Khamenei ha respondido así a las crecientes amenazas de Washington y a la exigencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de una “rendición incondicional” de Teheran, en un contexto en el que Trump ha afirmado tener “control total del espacio aéreo sobre Irán” y “conocer la ubicación exacta del líder iraní”, aunque ha asegurado que “no tiene intención de atacarle, al menos por ahora”.
Mientras tanto, el Estado de Israel ha intensificado sus ataques en territorio iraní y asegura haber bombardeado 40 objetivos militares en un solo día, incluyendo instalaciones de producción de misiles y centrifugadoras nucleares en Teheran y otras ciudades.
Según reportes de la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA) recogidos por Al Jazeera, han sido alcanzadas infraestructuras clave para el programa nuclear iraní, y fuentes israelíes afirman que más de 50 aviones participaron en los bombardeos nocturnos.
El balance provisional de víctimas, según autoridades iraníes, supera los 240 asesinados por los ataques israelíes, mientras que al menos 24 personas han muerto en la Palestina ocupada por el Estado de Israel por los misiles y drones lanzados desde Irán.
El riesgo de una escalada regional se mantiene alto, con advertencias de Irán sobre la posibilidad de extender el conflicto si hay intervención directa de terceros países y con Turquía defendiendo que la respuesta iraní es “natural, legal y legítima”.
Qatar, por su parte, ha recibido una carta del presidente iraní Masoud Pezeshkian, en el marco de los intentos diplomáticos para frenar la crisis.
Mientras tanto, en Gaza, la ofensiva israelí ha dejado al menos 89 palestinos exterminados solo en la última jornada, incluyendo al menos 70 personas que buscaban ayuda alimentaria en Khan Younis.