Los pobres viven hasta 13 años menos que los ricos en el Estado francés
Un nuevo estudio del INSEE confirma las diferencias entre rentas a pesar del aumento general de la esperanza de vida, lo que muestra una brecha vital de clase creciente.
Un informe publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos francés (INSEE) el 15 de diciembre revela que las desigualdades en esperanza de vida según el nivel de vida se han acentuado en el Estado francés. Los datos muestran que las personas pertenecientes al 5% más modesto tienen una esperanza de vida significativamente menor que aquellas del 5% más acomodado, alcanzando una diferencia de hasta 13 años en el caso de los hombres.
El estudio, titulado "De 2012-2016 a 2020-2024, la brecha en la esperanza de vida entre personas modestas y acomodadas se ha ampliado" (Insee Première n° 2085), compara dos períodos y confirma que cuanto mayor es el nivel de vida, mayor es la longevidad. Los umbrales se definen por el nivel de vida mensual: menos de unos 500 euros para el 5% más bajo y más de 6.427 euros para el 5% superior (datos medios ajustados por unidad de consumo).
Un abismo que crece
Entre los períodos analizados, la diferencia ha aumentado ligeramente. En 2020-2024, los hombres del 5% más modesto tenían una esperanza de vida de 72 años, frente a los 85 años de los del 5% más acomodado, lo que representa una diferencia de 13 años. Para las mujeres, la diferencia es de 9 años: 80,1 años para las más modestas y 88,7 años para las más acomodadas. Este incremento sugiere un mayor peso de causas de mortalidad más marcadas socialmente, posiblemente agravadas por la pandemia de Covid-19.
Además, la esperanza de vida ha disminuido en algunos segmentos del 25% más modesto, un fenómeno que el INSEE atribuye potencialmente al Covid o a otras patologías. Otros elementos correlacionados incluyen acceso limitado a cuidados por razones financieras, comportamientos de riesgo como el tabaquismo, exposición profesional a riesgos (como las muertes laborales) y condiciones de vida precarias. Un dato destacado: las mujeres del 5% más acomodado viven en promedio 17 años más que los hombres del 5% más modesto (88,7 años frente a 72). Este estudio, basado en el Échantillon Démographique Permanent y datos sociofiscales, subraya la persistencia de desigualdades estructurales, también en salud.