El PSOE celebró el pasado fin de semana su 41º Congreso Federal en Sevilla bajo el lema España adelanta por la izquierda. Durante el evento, los secretarios generales de los principales sindicatos del Estado español, Pepe Álvarez de UGT y Unai Sordo de CCOO, participaron activamente, reafirmando su respaldo al PSOE y llamando a reforzar su posición en favor del Gobierno español, tomando el peligro reaccionario como excusa.
Álvarez destacó que el actual Gobierno liderado por el PSOE es “el más transformador en la historia reciente de España”, subrayando la concertación habitual entre el Ejecutivo y los sindicatos. Entre los “logros” mencionados por el líder de UGT se encuentra la supuesta “reducción en la temporalidad laboral”, que ha quedado desmentida con los últimos datos que ha proporcionado el propio Ministerio de Trabajo este martes.
Por su parte, Sordo hizo un llamamiento a “la unidad” para fortalecer al PSOE en un contexto global marcado por el avance de fuerzas conservadoras. “En pocas ocasiones en la historia de nuestro país hemos necesitado tanto un PSOE fuerte”, señaló el líder de CCOO, quien también elogió “la gestión gubernamental en tiempos de crisis”. Según Sordo, “se ha llevado a cabo una política progresista que ha dado resultados positivos”.
Este respaldo de los principales sindicatos refuerza la estrategia del PSOE de presentarse como el principal baluarte frente a la derecha, una narrativa que volvió a estar en el centro del discurso durante el congreso. Sin embargo, sectores críticos dentro de la izquierda cuestionan la fidelidad incondicional de CCOO y UGT al partido, acusándolos de” priorizar su vínculo con el Gobierno por encima de las demandas de los trabajadores”.