El Estado español es el país con la hucha de pensiones más vacía entre las economías avanzadas, según el informe Pension Markets in Focus 2024 de la OCDE. Al cierre de 2023, el Fondo de Reserva de las pensiones alcanzaba 5.578 millones de euros, apenas un 0,4% del Producto Interior Bruto (PIB). En comparación, El Estado francés aún dispone de reservas equivalentes al 7% de su PIB, Estados Unidos al 9,7% y Suecia al 31,4%.
El sistema contributivo español sigue siendo deficitario, ya que el gasto mensual en pensiones supera los 12.000 millones de euros. Aunque las aportaciones del Mecanismo de Equidad Intergeneracional y el aumento de afiliados a la Seguridad Social han “mejorado” la situación, el fondo actual cubriría solo una fracción de las necesidades.
El Ejecutivo de Pedro Sánchez quiere cerrar 2027 con 31.000 millones de euros en el fondo de reserva, quintuplicando su tamaño respecto a 2023. Sin embargo, esto es tan solo un plan por ahora, y cifra aún quedaría lejos de los 66.000 millones alcanzados en 2011, antes de que una crisis económica y la alta tasa de desempleo redujeran las reservas en un 90%.