La deuda pública española ha vuelto a marcar un récord histórico en el tercer trimestre de 2024 al situarse en 1,64 billones de euros, según los datos publicados por el Banco de España. Esta cifra supone un incremento de nada más y nada menos que 10.053 millones respecto al trimestre anterior y un aumento de 57.304 millones en comparación con el mismo periodo de 2023, lo que refleja las dificultades para contener el crecimiento del endeudamiento.
A pesar de este máximo, la ratio de deuda pública sobre el PIB ha descendido hasta el 104,4 %, lo que supone una reducción de nueve décimas respecto al segundo trimestre y de tres puntos en términos interanuales. Este descenso se debe al reciente “cremiento económico” registrado en los últimos meses, basado principalmente en el turismo y la inmigración, que ha permitido que el peso relativo de la deuda disminuya a pesar de que el volumen total sigue en ascenso.
La evolución de la deuda sigue siendo uno de los principales desafíos para la economía española, en un contexto en el que se combinan las políticas expansivas con la presión por reducir los niveles de endeudamiento. La “mejora” del PIB ha sido clave para suavizar este indicador, aunque seguramente suponga que las autoridades refuercen el equilibrio fiscal en los próximos años para seguir las pautas europeas de reducción de la deuda.
