Austria encarga por primera vez a la ultraderecha la formación de Gobierno

El presidente austriaco encomienda al líder del FPÖ negociar una coalición tras el fracaso de las conversaciones entre conservadores, socialdemócratas y liberales.

Líder de la ultraderecha austriaca Herbert Kickl.
Foto: @LinnemannHeike (X)

El presidente de Austria, Alexander Van der Bellen, ha encargado formalmente la formación de Gobierno a Herbert Kickl, líder del ultraderechista Partido de la Libertad (FPÖ). La decisión llega tras el colapso de las negociaciones entre conservadores, socialdemócratas y liberales para formar una coalición de gobierno, marcando un hito en la historia de la democracia liberal del país, ya que es la primera vez que un líder de la ultraderecha asume este encargo desde la posguerra. Kickl, cuyo partido ganó las elecciones del 29 de septiembre con el 28,8% de los votos, se mostró dispuesto a “iniciar conversaciones para construir una mayoría parlamentaria estable”, según repora Kronen Zeitung.

El colapso de las negociaciones entre el conservador Partido Popular (ÖVP), los socialdemócratas y los liberales (Neos) allanó el camino para esta decisión. El intento de excluir al FPÖ mediante un tripartito fracasó tras desacuerdos sobre la gestión del déficit presupuestario y las reformas económicas. La líder de Neos, Beate Meinl-Reisinger, abandonó las conversaciones, y el canciller en funciones Karl Nehammer renunció a sus cargos, lo que dejó a los populareas del ÖVP abiertos a pactar con Kickl. El nuevo líder conservador, Christian Stocker, ha manifestado su disposición a negociar con el FPÖ, a pesar de las reticencias previas dentro de su partido.

La posibilidad de que Herbert Kickl asuma la jefatura de Gobierno plantea desafíos tanto a nivel interno como en las relaciones exteriores de Austria. Su afinidad con líderes como Viktor Orbán y su discurso euroescéptico generan inquietud en Bruselas y en sectores moderados de la política austriaca. Van der Bellen, aunque ha expresado su preocupación por la trayectoria del FPÖ, ha subrayado que garantizará “el respeto a los principios democráticos y constitucionales durante las negociaciones”. El futuro inmediato de Austria, en medio de un panorama político polarizado y con estrechos márgenes de negociación, dependerá de la capacidad del FPÖ para formar una coalición.