Italia ha intensificado su cooperación con Argelia desde que Giorgia Meloni asumió como primera ministra, consolidando una relación estratégica que abarca energía, seguridad e industria. Según TRT Français, Italia busca diversificar su suministro energético tras la crisis del gas ruso, convirtiéndose en el principal comprador de gas argelino desde un acuerdo firmado en 2019. En 2023, se añadieron contratos significativos como la inversión de 420 millones de euros para la producción de trigo en el sur de Argelia y la inauguración de una planta de Fiat en Tafraoui, cuya producción anual estimada es de entre 60.000 y 90.000 vehículos, tal como informó Carlos Tavares, exdirector de Stellantis.
La colaboración bilateral se amplió con visitas de altos funcionarios argelinos a Roma, incluyendo a ministros de Energía, Agricultura e Interior, subrayando la intención de profundizar la cooperación en sectores estratégicos. Según Mohamed Khelifi, embajador argelino en Italia, acuerdos recientes como el de extradición en septiembre de 2023 y el memorando para promover el estudio del italiano en Argelia evidencian la creciente importancia de esta alianza. También en 2024, se inauguró un centro consular en Tamanrasset, mostrando los intenciones de Italia en fortalecer la relación bilateral.
Esta estrategia ha generado tensiones entre Roma y París. La influencia histórica de los franceses en Argelia se ve desplazada. Como explica Umberto Profazio del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos en declaraciones a TRT Français, París utiliza críticas sobre derechos humanos en Túnez y Argelia para contrarrestar el avance italiano. Sin embargo, el fortalecimiento de un “triángulo estratégico” entre Roma, Argel y Túnez ha consolidado la posición de Italia en el Magreb, marcando una nueva dinámica de poder regional. Según TRT Français, este cambio podría indicar un “adiós” definitivo de Argelia a la influencia francesa, aunque solo el tiempo confirmará esta tendencia.
