Detienen a Calin Georgescu en Rumanía en medio de tensiones electorales

El líder de la extrema derecha rumana, cuya victoria electoral fue anulada, es arrestado bajo acusaciones de “financiación irregular” y “vínculos con el fascismo”, mientras sus seguidores denuncian la “persecución política”.

Detención del candidato de la extrema derecha rumana Calin Georgescu.
Foto: @MarioNawfal (X).

El político ultraderechista rumano Calin Georgescu, conocido por marcar distancias con la UE y la OTAN, ha sido detenido este miércoles por la policía de Bucarest (Rumanía). La Fiscalía ha abierto una investigación en su contra por presunta “financiación irregular de su campaña y promoción de propaganda fascista”. Además, se han llevado a cabo 47 registros en propiedades vinculadas a su entorno, incluyendo la residencia de su colaborador cercano, Horatiu Potra. Estas acciones se producen tras la anulación de las elecciones presidenciales de noviembre pasado, en las que Georgescu obtuvo una victoria sorpresiva. El proceso electoral fue cuestionado por supuestas “injerencias rusas”.

El equipo de prensa de Georgescu ha confirmado su arresto y ha señalado que el líder tenía la intención de presentar nuevamente su candidatura para las elecciones reprogramadas el 4 de mayo. En un comunicado difundido en su cuenta oficial de Facebook, sus seguidores han lanzado la siguente acusación: “¿Dónde está la democracia?”. Por su parte, el primer ministro rumano, Marcel Ciolacu, ha enfatizado “la independencia del sistema judicial del país” y ha subrayado “la necesidad de que las investigaciones presenten pruebas extremadamente sólidas”, especialmente cuando involucran a posibles candidatos electorales.

Simpatizantes de Georgescu, en particular miembros de la Alianza para la Unidad de los Rumanos (AUR), se han congregado en una manifestación frente a la sede de la Fiscalía en Bucarest en protesta por su detención. La Gendarmería rumana ha desplegado un dispositivo de seguridad para mantener el orden público durante la concentración. Mientras tanto, analistas políticos advierten que, si las autoridades no presentan un caso sólido contra Georgescu, podrían convertirlo en un mártir político, lo que podría influir en su popularidad de cara a las próximas elecciones.