El ministro de Energía de Israel, Eli Cohen, ordenó este domingo a la Empresa Eléctrica de Israel (IEC) detener el suministro de electricidad a la Franja de Gaza, según un comunicado oficial de su ministerio. La medida se produce en el contexto de las negociaciones entre Israel y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) sobre la liberación de los prisioneros de guerra tomados durante el 7 de octubre de 2023. “Vamos a emplear todas las herramientas disponibles para que todos los rehenes vuelvan”, declaró Cohen en un vídeo publicado en sus redes sociales.
Un portavoz de Hamas, Izzat al Rishq, calificó el corte de electricidad como “un castigo colectivo y un crimen de guerra con todas las de la ley”, según un comunicado recogido por la agencia WAFA. Autoridades de Gaza confirmaron que la medida afecta a la planta desalinizadora en el sur del enclave, que dependía de la electricidad suministrada por el ocupante. La semana pasada, el gobierno israelí ya había suspendido la entrada de ayuda humanitaria, en respuesta a lo que considera “la negativa de Hamas a aceptar una propuesta de alto el fuego promovida por Estados Unidos”.
El acuerdo de tregua entre el Estado de Israel y la Resistencia Palestina, que comenzó el 19 de enero, incluía la liberación de rehenes a cambio de prisioneros palestinos. La primera fase concluyó el 1 de marzo y, según los términos del pacto, debía dar paso a negociaciones para “un cese al fuego definitivo”. Sin embargo, las conversaciones no han avanzado y el gobierno israelí ha advertido que tomará “consecuencias adicionales”, según declaró un portavoz del Ejército de Israel a la cadena Kan.