Dirigentes del PSOE exigen a Sánchez una “depuración radical” tras la implicación de Cerdán en el caso Koldo

La dirección del partido afronta una crisis interna sin precedentes tras el informe de la UCO que señala a Santos Cerdán como presunto gestor de una trama de comisiones ilegales.

Rueda de prensa de María Jesús Montero.
Foto: @PSOE (X)

El PSOE atraviesa una crisis interna de gran magnitud tras la dimisión de Santos Cerdán como secretario de Organización, motivada por su implicación en el caso Koldo, según el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.

El documento sitúa a Cerdán como supuesto cerebro de una trama de comisiones ilegales junto a José Luis Ábalos y Koldo García, y recoge grabaciones que lo vinculan con la gestión de pagos y posibles amaños en las primarias del partido en 2014.

Pedro Sánchez, tras una reunión extraordinaria con la dirección federal, ha pedido “perdón a la ciudadanía” por confiar en Cerdán, ha anunciado “una auditoría externa de las cuentas del PSOE” y ha prometido “una reestructuración profunda de la cúpula”, aunque ha descartado un adelanto electoral o una cuestión de confianza.

La reacción en el partido ha sido inmediata: varios ministros y dirigentes territoriales han exigido una “limpia radical” de los cuadros próximos a Cerdán y reclaman que la “renovación” de la ejecutiva sea “profunda y sin excepciones”, según declaraciones recogidas por El País.

La vicepresidenta primera, María Jesús Montero, ha declarado sentirse “profundamente traicionada” y ha subrayado que el PSOE ha actuado “con absoluta contundencia” tras conocerse los indicios del informe policial.

Otros líderes insisten en que “está en juego la imagen del partido” y piden adelantar el comité federal previsto para el 5 de julio, con el objetivo de abordar la gravedad de la crisis y aprobar “los cambios necesarios en la dirección”.

El exsecretario de Organización, Santos Cerdán, ha defendido públicamente “su inocencia” y ha asegurado que entregará su acta de diputado para “pelear por su inocencia”, según declaraciones a laSexta.

Mientras tanto, la tensión con los socios de Gobierno se ha incrementado: Sumar ha declarado “rota la confianza” con el PSOE y exige “medidas implacables” contra la corrupción.

El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha reconocido la solidez del informe de la UCO, pero ha descartado por el momento una cuestión de confianza para Sánchez.

La dirección del PSOE afronta ahora la presión de sus bases y de la opinión pública para ejecutar una “renovación” creíble y restaurar la confianza en el partido.