El Ejército Popular de Liberación chino (EPL) vive una de sus mayores campañas disciplinarias de las últimas décadas, según un análisis del South China Morning Post basado en fuentes oficiales y testimonios de expertos. En los últimos dos años, al menos dos de los siete miembros de la poderosa Comisión Militar Central (CMC), el máximo órgano castrense dirigido por Xi Jinping, han sido destituidos, mientras que un tercero ha desaparecido de la escena pública durante más de un mes.
El miércoles, la Asamblea Nacional Popular retiró el escaño parlamentario a Miao Hua, jefe ideológico del EPL y responsable de cambios de personal, que fue suspendido y puesto bajo investigación desde noviembre. Otros dos exministros de Defensa, Li Shangfu —quien tuvo el mandato más breve del cargo en décadas— y su predecesor Wei Fenghe, también fueron investigados por corrupción y expulsados del Partido Comunista Chino.
Todas estas purgas se suman a la ausencia prolongada del vicejefe de la CMC, He Weidong, que no ha asistido a varias de las principales reuniones del Politburó en las últimas semanas, alimentando especulaciones sobre su situación. Expertos citados por SCMP apuntan a que esta ola disciplinaria, lejos de señalar debilidad de Xi sobre el ejército, refleja “el rigor del aparato central por mantener cohesión y disciplina en medio de posibles rivalidades internas”. Además, señalan que la campaña puede estar motivada también por la competencia entre distintas facciones o leales al propio Xi, más que por una crisis de autoridad visible.
A pesar del alcance de las destituciones, los analistas estiman que el impacto en la preparación bélica y la modernización militar es limitado. Sin embargo, la presión sobre los oficiales políticos del EPL se ha manifestado en directrices públicas del PLA Daily exigiendo “mayor integridad, transparencia y lealtad sin fisuras” al liderazgo central, según se detalla en la serie editorial y los nuevos códigos disciplinarios. Los sucesos muestran el clima de máxima vigilancia y control que rodea a la élite militar china en un momento de transformación, tensiones externas y puesta en orden interno.