El Mundo criminaliza las protestas en la Vuelta y al Movimiento Socialista
El medio señala en portada a organizaciones del Movimiento Socialista y "grupos radicales", en un intento de criminalizar una respuesta popular y transversal.

Un artículo publicado este miércoles en la portada del diario El Mundo sitúa en el punto de mira las protestas contra la Vuelta Ciclista a España por el genocidio en Palestina, que han desembocado en la suspensión de las etapas finales en Bilbo y Madrid. Ahora, tras el éxito de las movilizaciones, El Mundo y la policía buscan culpables, y para ello señalan a Gazte Koordinadora Sozialista (GKS) y al Movimiento Socialista en su conjunto, presentándolos como "grupos radicales responsables" de los incidentes ocurridos: Los comunistas y radicales vascos que llevaron el boicot contra la Vuelta de Bilbao a Madrid mantienen las protestas. GKS, el grupo radical con franquicias en toda España, actúa envalentonado tras el éxito, afirma el diario en portada.
Sin embargo, lo ocurrido en Catalunya, Euskal Herria, Asturies, Galiza y Madrid va más allá de siglas concretas. En las concentraciones y acciones se han podido ver diferentes plataformas propalestinas, movimientos políticos y sociales, así como individuos sin adscripción partidaria. Las suspensiones de las etapas deportivas en Bilbo y la victoria en Madrid representaron, por tanto, la magnitud del clamor popular en rechazo al genocidio que el Estado de Israel está cometiendo en Gaza. Ante esto, El Mundo prioriza un discurso centrado en la "seguridad" mezclado con la búsqueda de cabezas de turco, ignorando la amplia base social de las protestas.
Más mentiras de El Mundo sobre las protestas en la Vuelta: "ETA", "Yihadismo", "Kale borroka" y "autobuses desde el País Vasco"
Anteriormente ha habido más intentos confusos de criminalización de las protestas contra la Vuelta por parte de El Mundo. Anteayer, 15 de septiembre, publicaron un artículo en el que decían que la Policía española había identificado en Callao a nueve ciudadanos vascos “condenados por kale borroka”; así como también a “varios yihadistas”. En el caso de los primeros nueve identificados, el periódico los vinculaba con “el terrorismo de ETA”, “la colaboración con grupo terrorista” y “desórdenes públicos”, sin ofrecer ninguna explicación al respecto.
Además, el artículo señalaba que en el mismo lugar habían identificado a “varios hombres” supuestamente relacionados con “el terrorismo yihadista”, pero en ese caso tampoco precisaron más sin. Sin embargo, el propio Ministerio del Interior español desmintió que se hubieran producido tales identificaciones: “No se hizo ninguna identificación con esos perfiles”.
Por otro lado, El Mundo destacaba y criminalizaba que “numerosas personas” se hubieran desplazado desde Euskal Herria a Madrid con motivo de las protestas contra la Vuelta; en ese caso, mencionaba intervenciones de la Guardia Civil. En el artículo se decía que esos manifestantes habían ido “en autobuses”, que su intención era “boicotear varios tramos de la carrera” y que se trataba de algo “planificado”, en el tono habitual de los montajes policiales: “El hecho de que los autobuses salieran y llegaran a Madrid de una forma tan organizada nos hace estar en guardia”. Al mismo tiempo, se explicaba que habían “investigado a decenas de personas procedentes de Euskadi” en relación con las protestas de la Vuelta.
Las protestas no paran
Mientras la presión mediática se centra en señalar responsables y exigir dimisiones por la gestión del dispositivo de la Vuelta, en Euskal Herria y en varios puntos del Estado continúan convocándose movilizaciones contra el genocidio en Palestina. Los diversos movimientos propalestinos insisten en que lo que se está viviendo en las calles no es la acción de una sola organización o un solo movimiento, sino parte de una amplia respuesta popular que responde a una ola internacional de solidaridad contra el genocidio y la complicidad directa de las instituciones y empresas con el Estado de Israel.