La Operación Íncubo, instruida por el juzgado especializado en violencia contra la infancia de Las Palmas, investiga a trece personas por la presunta explotación sexual de al menos 34 menores, muchas de ellas bajo tutela de la administración canaria. Según documentos judiciales a los que tuvo acceso El Español, entre los investigados figuran personas vinculadas a "gente de dinero" y "potentes empresarios" de las islas.

Agustín Alemán Barreto, alias Yino, se encuentra en prisión provisional junto a otros dos investigados. En declaraciones recogidas en actas policiales, Alemán describe escenas perturbadoras, afirma que "daba [a las menores] a gente de dinero", menciona "cenas gratuitas" y que "le compraron" una furgoneta. La investigación señala que entre los clientes se encontraban "empresarios millonarios" según la documentación judicial aportada al medio digital.

El modus operandi consistía en captar menores a través de redes sociales con "ofertas de trabajo" como "chicas de imagen", según la Policía Canaria. Las víctimas, en su mayoría procedentes de hogares tutelados, eran trasladadas en una furgoneta —apodada "la follafurgoneta"— a encuentros en chalés, hoteles y apartamentos del sur de la isla. El sumario describe pagos en metálico y obsequios como perfumes o cigarrillos electrónicos.

La investigación revela que esta trama operaba con patrones similares al caso 18 Lovas, aún pendiente de juicio, donde también se investigaba la explotación de menores para pudientes empresarios. La Fiscalía mantiene la prisión provisional para los principales investigados, un ojeador del Deportivo de la Coruña entre ellos, ante el riesgo de reiteración delictiva y para proteger a las víctimas, mientras continúan las diligencias.