Despliegue de la UME en Catalunya para contener un brote de peste porcina que amenaza con paralizar las exportaciones del sector
117 efectivos militares se movilizan en Collserola tras detectarse jabalíes contagiados; Reino Unido bloquea las importaciones de porcino del Estado español español y Bruselas envía expertos.
La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha desplegado 117 efectivos y 25 vehículos en la zona de Collserola (Barcelona, Catalunya) para tratar de contener el primer brote de peste porcina en el Estado español desde 1994, a petición de la Generalitat de Catalunya. Según informa la agencia EFE, el contingente procede mayoritariamente del Grupo de Intervención de Emergencias Tecnológicas y Medioambientales (GIETMA) de Torrejón de Ardoz y del IV Batallón de Zaragoza. La misión será "apoyar los trabajos técnicos y veterinarios en el terreno", bajo la coordinación de la administración catalana dirigida por el PSC.
El brote, detectado en jabalíes del área de Cerdanyola del Vallès, ya ha provocado la paralización de las exportaciones de porcino del Estado español al Reino Unido desde el viernes pasado, una medida que afecta a productos frescos y procesados valorados en 160 millones de euros en 2024, según datos recabados por la agencia. El conseller de Agricultura de la Generalitat, Òscar Ordeig, confirmó ante RAC1 que entre cerca de 40 jabalíes analizados, dos han dado positivo y ocho son "sospechosos", advirtiendo que "seguramente saldrán más positivos" y que si el brote se descontrola "será terrible" para el sector.
La Comisión Europea ha ya ha exigido al Gobierno español que aplique "las medidas previstas en la legislación europea" y enviará a partir de este martes expertos veterinarios a la zona para asesorar a las autoridades, según anunció su portavoz Eva Hrncirova. Sin embargo, estas medidas a suponen sacrificar el ganado porcino de forma masiva, generando un impacto significativo en los pequeños productores del sector agropecuario.
Ordeig señaló que la hipótesis más probable del origen es que "un embutido, un bocadillo contaminado" llegase a la basura y fuese ingerido por un jabalí, lo que representaría "un salto del virus vía el transporte humano". Sin embargo, esta hipótesis no ha sido confirmada por el momento. En otras epidemias, ha sido habitual que la interacción con determinadas actividades humanas generen focos de infección. La alteración de los ecosistemas y las cadenas tróficas juega un papel crucial en estos fenómenos. El caso de los jabalíes es especialmente conocido en la península ibérica: la desaparición de los lobos ha generado que la población de jabalíes crezca de manera descontrolada, lo que habitualmente genera que esta especie se acerque a asentamientos y basureros humanos en busca de comida, multiplicando el riesgo de infección.
El despliegue militar llega en un escenario de máxima alerta para un sector que representa hasta el 40% las exportaciones agroalimentarias del Estado español. Las autoridades catalanas han pedido "colaboración ciudadana" para no alimentar a los jabalíes y asegurar las basuras, mientras intentan negociar con países como el Reino Unido la "regionalización" de las prohibiciones para limitar su impacto económico. Las tareas de los próximos días determinarán si el brote se aísla o se convierte en una crisis sanitaria y comercial de gran escala.