El Congreso de los Diputados aprueba una inyección de 7.720 millones en ayudas públicas a empresas exportadoras

El decreto establece avales y subvenciones financiadas con dinero público para “mitigar el impacto de los aranceles de EEUU”.

Imagen de archivo del Congreso de los Diputados en Madrid.
Foto: @Congreso_Es (X)

El Congreso de los Diputados ha convalidado este jueves el decreto ley del Ejecutivo que contempla una inyección de 7.720 millones de euros en avales y ayudas públicas para empresas afectadas por los aranceles anunciados por la administración de Donald Trump.

La medida, vigente desde el 9 de abril tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), ha sido aprobada con los votos a favor de PSOE, Sumar, ERC, Junts, EH Bildu, PNV, BNG y Coalición Canaria, frente al rechazo del Partido Popular, Vox y UPN, y la abstención de Podemos, según recoge Europa Press.

El paquete económico incluye líneas de avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO) y recursos destinados a impulsar “la internacionalización empresarial”. Sin embargo, el contenido del decreto y, en particular, el acuerdo alcanzado con Junts para que el reparto de ayudas públicas a empresas se base en el volumen de exportaciones —lo que se traducirá en que Catalunya reciba un 25 % del total—, ha suscitado el rechazo del PP.

“El único plan que conocen es el del Partido Popular. Nosotros lo pusimos encima de la mesa y el Gobierno decidió que nuestras propuestas no le parecían adecuadas”, ha declarado el vicesecretario de Economía del PP, Juan Bravo.

Podemos, por su parte, ha justificado su abstención por “la falta de medidas estructurales”. Su secretaria general, Ione Belarra, declara que “el decreto no será útil para proteger al tejido productivo ni a los trabajadores” y condiciona un posible apoyo a la inclusión de “una reforma legislativa que permita expropiar viviendas en manos de fondos de inversión estadounidenses”. Mientras formaba parte del Gobierno de coalición, Podemos no propuso la expropiación de viviendas en manos de fondos de inversión estadounidenses.

Acto seguido, Belarra ha vuelto a cuestionar el gasto militar del Ejecutivo, al que acusa de destinar “10.500 millones este año” mientras “no puede hacer frente a la guerra comercial de Trump”. Pedro Sánchez se ha defendido citando unas declaraciones de Pablo Iglesias de 2014 en las que afirmaba que “aumentaría el presupuesto de defensa si es necesario para asegurar la independencia del país y los derechos sociales y civiles”.

Sánchez ha señalado estar de acuerdo con esa visión y ha subrayado que “la inversión en seguridad y defensa es fundamental para defender nuestra independencia y nuestros valores”. Iglesias ha respondido en redes sociales que “aumentar el gasto militar siguiendo las instrucciones de la OTAN es exactamente lo contrario a trabajar por la independencia de nuestro país”.