La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil localizó la semana pasada una escritura privada que demuestra que Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE, adquirió en 2016 casi la mitad de las participaciones sociales de la constructora navarra Servinabar, empresa situada por los investigadores en el epicentro de la presunta trama de corrupción investigada por el Tribunal Supremo.
El documento, que data del 1 de junio de 2016 y hallado en el domicilio de Joseba Antxon Alonso Egurola, administrador único de la sociedad, acredita la transferencia de 1.350 de las 3.000 participaciones sociales a nombre de Cerdán, lo que supone nada más y nada menos que el 45% del capital de la compañía.
Según los informes de la UCO, Servinabar fue creada en 2015 y utilizada como “vehículo” para canalizar mordidas y repartir beneficios derivados de adjudicaciones públicas, principalmente a través de la constitución de UTEs con grandes empresas como Acciona.
Los investigadores consideran que la empresa facilitó la relación entre los miembros de la trama y la obtención de contratos públicos, y destacan que el modelo aplicado en Nafarroa fue posteriormente exportado a Madrid por Cerdán y Koldo García, una vez escalaron de la mano de Pedro Sánchez a la política estatal.
La sede social de Servinabar en Iruñea y el domicilio de Alonso fueron registrados el pasado 10 de junio, en una operación dirigida por el magistrado Leopoldo Puente y centrada en la obtención de pruebas sobre el funcionamiento de la red y el reparto de beneficios.
La investigación señala vínculos directos entre Cerdán, Koldo García, Acciona y otros empresarios, y apunta que la relación entre estas partes permitió la presunta adjudicación irregular de contratos públicos a cambio de comisiones, según recogen medios como eldiario.es, El Confidencial, EFE, Diario de Navarra, Pamplona Actual y El Español.